Muchas veces, al teñir el cabello de un color castaño claro o rubio, las cejas son más oscuras que el color de tinte elegido y contrastan demasiado, dando un aspecto algo artificial al tono del cabello. Aunque en la peluquería puede corregirse este problema aplicando un poco de tinte sobre ellas, también puedes aclarar tus cejas de forma natural tú misma con el siguiente truco:
Empapa un viejo cepillo de dientes o pincel en zumo de limón, peina tus cejas con él y déjalas secar al sol.
Un consejillo: Aunque el limón es uno de los mejores remedios naturales para aclarar el cabello, no te lo apliques en el pelo porque podría resecártelo en exceso.