Si quieres maquillar tus ojos con purpurina para alguna ocasión especial, la opción más sencilla es usar una sombra de ojos en crema a modo de base y después aplicar una pequeña cantidad de purpurina a golpecitos con un pincel plano.
Para un resultado más duradero, extiende sobre el párpado una gotita del mismo pegamento que se utiliza para adherir las pestañas postizas, un truco que también puedes emplear para decorar las uñas con purpurina.
Si todo esto te parece un tanto engorroso, elige una sombra de ojos en roll-on con purpurina o una en polvo con partículas brillantes. El resultado es algo menos impactante, pero igual de atractivo.